Tenía noticias de las diferencias significativas entre la formación del profesorado en Finlandia y en España, pero me ha sorprendido cuando he leído este detallado artículo que los compara.
En Finlandia:
- Fase A - Selección nacional. Se exige más de un 9 de promedio en bachillerato y la reválida. También se valora su participación en actividades sociales. Esta prueba es exclusiva para profesores de primaria. Se debe tener en cuenta que en Finlandia se considera que los mejores profesores deben estar en las primeras etapas educativas.
- Fase B - Selección en cada facultad de educación. Cada universidad selecciona según las demás características que, por sus necesidades o estudios científicos, encajen mejor con el perfil buscado. Las pruebas son: entrevista, un resumen de una lectura de un libro, una explicación ante una pequeña clase de un tema, demostrar aptitudes artísticas (dibujar o pruebas de dominio de un instrumento musical), una prueba de matemáticas y otra de aptitudes para la tecnología de la información. Esta fase la realizan tanto los profesores de primara como los de secundaria.
- Fase C - Selección del profesorado. Selección de los profesores del departamento de formación docente y de las escuelas de prácticas. Los centros de práctica son centros de excelencia y los profesores de éstas son los mejores de todas las promociones y de las especialidades que enseñan
- Una vez obtenido el título de profesor no se realiza oposiciones. Los profesores son seleccionados por los directores de los centros, siendo los directores elegidos por el consejo municipal.
Vamos a ver que puede ocurrir en España para un profesor de secundaria.
- En España, puedes entrar en algunas carreras tan sólo teniendo el bachillerato. Incluso no es necesario si accedes a través de una prueba de acceso para mayores de 25 años.
- Con respecto a la formación docente, ahora mismo se exige el CAP. Recientemente el CAP es un master y la verdad que no sé como funciona pero no creo que se pueda comparar a la formación planteada en Finlandia. En mi caso, oposiciones del 2006, el CAP no era requisito para mi especialidad (Informática). Pero por ejemplo, te podías apuntar al CAP de la Universidad Complutense de Madrid, te ibas dos días (uno para un examen tipo test y otro para una charlita) y listo.
- Te apuntas a la lista de sustituciones (no hay pruebas, ni entrevistas, sólo entregas los méritos). Estas unos años acumulando puntos por experiencia docente. Eso sí, una experiencia que no está respaldada con ningún informe que acredite el correcto desempeño. El orden en la lista de oposiciones sobre todo se basa en la antigüedad: el primero en llegar manda. Por ejemplo, esto se ha intentado cambiar este año pero parece que no será posible (y hasta aquí puedo seguir escribiendo acerca de esto...). Ufff..., esto no lo sabía, así que no fui sustituto.
- Luego, te presentas a unas oposiciones. Las pruebas de conocimiento no hace falta aprobarlas, no son eliminatorias. Accedes a la fase de mérito y con los puntos obtenidos por experiencia docente obtienes la plaza. Por ejemplo, hay profesores que obtienen la plaza de funcionario sacando por debajo de 2.5 en las pruebas de conocimiento. Para completar los méritos por formación, te puedes hacer un par de cursos a distancia como los de la Universidad XXXX, que pagando 150 € te certifican 110 horas realizando simplemente 4 cuestionarios online (te permite reintentos:). Otro detallito, si has sido sustituto, normalmente conocerás a una gran parte del jurado, con lo que seguramente tienes más facilidades.
- Luego para obtener destino definitivo, se puntúa sobre todo la antigüedad en el cuerpo y el puesto en las oposiciones correspondiente. Tu labor no se valorará, da igual si has sido un mal o buen profesor.
¿Ves alguna diferencia entre Finlandia y España? Pues parece que nuestros políticos no son capaces de verlas.
